miércoles, 22 de mayo de 2024

Santo Evangelio 22 de Mayo 2024



 Texto del Evangelio (Mc 9,38-40):

 En aquel tiempo, Juan dijo a Jesús: «Maestro, hemos visto a uno que expulsaba demonios en tu nombre y no viene con nosotros y tratamos de impedírselo porque no venía con nosotros». Pero Jesús dijo: «No se lo impidáis, pues no hay nadie que obre un milagro invocando mi nombre y que luego sea capaz de hablar mal de mí. Pues el que no está contra nosotros, está por nosotros».



«El que no está contra nosotros, está por nosotros»


Rev. D. David CODINA i Pérez

(Puigcerdà, Gerona, España)

Hoy escuchamos una recriminación al apóstol Juan, que ve a gente obrar el bien en el nombre de Cristo sin formar parte del grupo de sus discípulos: «Maestro, hemos visto a uno que expulsaba demonios en tu nombre y tratamos de impedírselo porque no viene con nosotros» (Mc 9,38). Jesús nos da la mirada adecuada que hemos de tener ante estas personas: acogerlas y ensanchar nuestras miras, con humildad respecto a nosotros mismos, compartiendo siempre un mismo nexo de comunión, una misma fe, una misma orientación, es decir, caminar juntos hacia la perfección del amor a Dios y al prójimo.

Esta manera de vivir nuestra vocación de “Iglesia” nos invita a revisar con paz y seriedad la coherencia con que vivimos esta apertura de Jesucristo. Mientras haya “otros” que nos “molesten” porque hacen lo mismo que nosotros, esto es un claro indicio de que todavía el amor de Cristo no nos impregna en toda su profundidad, y nos pedirá la “humildad” de aceptar que no agotamos “toda la sabiduría y el amor de Dios”. En definitiva, aceptar que somos aquellos que Cristo escoge para anunciar a todos cómo la humildad es el camino para acercarnos a Dios.

Jesús obró así desde su Encarnación, cuando nos acerca al máximo la majestad de Dios en la pequeñez de los pobres. Dice san Juan Crisóstomo: «Cristo no se contentó con padecer la cruz y la muerte, sino que quiso también hacerse pobre y peregrino, ir errante y desnudo, quiso ser arrojado en la cárcel y sufrir las debilidades, para lograr de ti la conversión». Si Cristo no dejó pasar oportunidad alguna para que vivamos el amor con los demás, tampoco dejemos pasar la ocasión de aceptar al que es diferente a nosotros en la manera de vivir su vocación a formar parte de la Iglesia, porque «el que no está contra nosotros, está por nosotros» (Mc 9,40).


Deprimido, vivía encerrado como un «hikikomori»... a sus 53 años abrazó la fe: «Dios velaba por mí»



 Deprimido, vivía encerrado como un «hikikomori»... a sus 53 años abrazó la fe: «Dios velaba por mí»

Takanori Sakakura 

Se sentía contento de haberse curado pero, dice, hay una gran diferencia entre "comprenderlo" y "vivirlo realmente". Porque, "hay una manera de vivir que lo confía todo a una existencia que va más allá de uno mismo", asegura.

Takanori Sakakura se puso Lucas como nombre de bautismo en la pasada vigilia Pascual. A sus 53 años ingresó en la Iglesia católica tras descubrir que la fe aliviaba las "dificultades de vivir". Fue bautizado en la Iglesia Católica de Ube en la prefectura japonesa de Yamaguchi el pasado 30 de marzo. Asami Ohmoto, en el portal UCA News, cuenta su testimonio. 

La terrible presión social que viven los japoneses desde bien pequeños es una verdadera epidemia que provoca miles de suicidios y enfermedades al año en el país nipón. Médico de profesión, Takanori vivía deprimido hasta que pudo pasar de "vivir una vida de esfuerzo personal" a "vivir una vida de confianza en Dios".

El viaje a Kenia y su hermano

Es más, como psiquiatra de profesión, Sakakura ayuda a las personas que no desean seguir viviendo, quien mejor que él que sufrió dificultades en este sentido durante muchos años. Aunque pensó en suicidarse desde muy adolescente, cuando estaba en la escuela secundaria se encerró en su casa como un "hikikomori" -personas, en Japón, que no salen de la habitación durante años, ya que carecen de cualquier tipo de esperanza para sus vidas-.  

Finalmente dejó de ir al colegio y abandonó la universidad. Incluso después de conseguir un trabajo, se ausentaba muchas veces del trabajo sin permiso. Sus padres lo etiquetaron como "vago" y "poco serio", una auténtica deshonra para un país en el que el esfuerzo lo es todo. Sakakura cayó en una profunda depresión, entrando en un círculo vicioso.

Hasta que un día, cuando Sakakura tenía veintitantos años, emprendió un viaje alrededor del mundo con el deseo de superar la situación. Desde China viajó a Pakistán y la India, para luego dirigirse a Kenia, país que le fascinó siempre desde niño. Allí participó en las actividades de una ONG que construía escuelas y brindaba atención médica.

"Recorrí pueblos donde no había clínicas ni médicos, allí decidí ser médico", comenta. "Estaba atrapado en muchos problemas que no podía resolver por mi cuenta". Durante tres años y medio permaneció en Kenia, luego fue a Estados Unidos, regresó a Japón, y volvió a realizar los exámenes de acceso a la universidad y se convirtió en médico a los 37 años.

Convertirse en médico le dio mucha confianza, sabía que podría arreglárselas si lo intentaba, aunque nada de eso cambió las "dificultades de seguir viviendo". Su complejo estado mental de falta de confianza continuó. En ese momento, hace diez años, su hermano menor, que sufría acoso en el trabajo, intentó suicidarse.  


TakanoriAunque pensó en suicidarse desde muy adolescente, cuando estaba en la escuela secundaria se encerró en su casa como un "hikikomori".

Entonces, Sakakura se preguntó si había algo que pudiera hacer por su hermano. Así que decidió que iba a dedicarse a ayudar a las personas que padecían depresión, se especializaría en psiquiatría. Sin embargo, la luz no iba a aparecer en el pozo en el que se encontraba.

"Podía hacer mucho por los demás, pero estaba atrapado en muchos problemas que no podía resolver por mi cuenta, incluido el tema de mi hermano. Incapaz de encontrar una solución, me peleé con mi mujer, tuve problemas en mi trabajo y comencé a 'escapar' metiéndome en el alcohol. Bebía cada vez más y, antes de darme cuenta, ya era alcohólico", relata-

Aun así, sería este problema con el alcohol lo que provocaría un cambio en la vida de Sakakura. Empezó a participar en un grupo para alcohólicos. Al principio se sentía contento de haberse curado, pero, dice, hay una gran diferencia entre "comprenderlo" y "vivirlo realmente". Porque, "hay una manera de vivir que lo confía todo a una existencia que va más allá de uno mismo", asegura.

"Con el tiempo me deprimí otra vez, me preguntaba por qué no podía lograr aquello que deseaba si me esforzaba tanto, y, hace cuatro años, decidí que iba a morir, tras un ataque de ira". Pero, Sakakura recuerda: "Me sentí culpable, sería una traición a mi esposa y a mis hijos. Fue, precisamente, al tocar 'fondo', cuando cambié mi forma de vida 180 grados", confiesa.

En el proceso, el psiquiatra aprendió por primera vez que "hay una manera de vivir que confía todo a una existencia más allá de uno mismo", y experimentó la "salvación". Sakakura sintió que había "un Dios cálido que siempre velaba por mí". En mayo del año pasado, empezó a asistir a charlas para catecúmenos en la Iglesia de Ube.

La parábola del hijo pródigo fue la que más le tocó. "No solía tener un trabajo convencional y fui mal hijo con mis padres, era un hijo pródigo", comenta. La imagen de aquel padre que acoge calurosamente a su hijo le hizo descubrir cómo "Dios me perdonó incluso cuando yo deseaba morir. Empecé a sentir esperanza".


Aquí puedes ver un pequeño reportaje sobre el fenómeno de los "hikikomoris".

"Solía ​​deprimirme, me preocupaba el futuro tenían mucha ansiedad. Ahora confío en Dios, así es más fácil vivir", dice Sakakura, que quiere compartir su testimonio con la gente de la iglesia y que tiene el sueño de algún día practicar la medicina en Kenia.  

Fuente: Religión en Libertad

martes, 21 de mayo de 2024

Santo Evangelio 21 de Mayo 2024



 Texto del Evangelio (Mc 9,30-37):

 En aquel tiempo, Jesús y sus discípulos iban caminando por Galilea, pero Él no quería que se supiera. Iba enseñando a sus discípulos. Les decía: «El Hijo del hombre será entregado en manos de los hombres; le matarán y a los tres días de haber muerto resucitará». Pero ellos no entendían lo que les decía y temían preguntarle.

Llegaron a Cafarnaúm, y una vez en casa, les preguntaba: «¿De qué discutíais por el camino?». Ellos callaron, pues por el camino habían discutido entre sí quién era el mayor. Entonces se sentó, llamó a los Doce, y les dijo: «Si uno quiere ser el primero, sea el último de todos y el servidor de todos». Y tomando un niño, le puso en medio de ellos, le estrechó entre sus brazos y les dijo: «El que reciba a un niño como éste en mi nombre, a mí me recibe; y el que me reciba a mí, no me recibe a mí sino a Aquel que me ha enviado».



«El Hijo del hombre será entregado»


Rev. D. Jordi PASCUAL i Bancells

(Salt, Girona, España)

Hoy, el Evangelio nos trae dos enseñanzas de Jesús, que están estrechamente ligadas una a otra. Por un lado, el Señor les anuncia que «le matarán y a los tres días de haber muerto resucitará» (Mc 9,31). Es la voluntad del Padre para Él: para esto ha venido al mundo; así quiere liberarnos de la esclavitud del pecado y de la muerte eterna; de esta manera Jesús nos hará hijos de Dios. La entrega del Señor hasta el extremo de dar su vida por nosotros muestra la infinidad del Amor de Dios: un Amor sin medida, un Amor al que no le importa abajarse hasta la locura y el escándalo de la Cruz.

Resulta aterrador escuchar la reacción de los Apóstoles, todavía demasiado ocupados en contemplarse a sí mismos y olvidándose de aprender del Maestro: «No entendían lo que les decía» (Mc 9,32), porque por el camino iban discutiendo quién de ellos sería el más grande, y, por si acaso les toca recibir, no se atreven a hacerle ninguna pregunta.

Con delicada paciencia, Jesús añade: hay que hacerse el último y servidor de todos. Hay que acoger al sencillo y pequeño, porque el Señor ha querido identificarse con él. Debemos acoger a Jesús en nuestra vida porque así estamos abriendo las puertas a Dios mismo. Es como un programa de vida para ir caminando.

Así lo explica con claridad el Santo Cura de Ars, Juan Bautista Mª Vianney: «Cada vez que podemos renunciar a nuestra voluntad para hacer la de los otros, siempre que ésta no vaya contra la ley de Dios, conseguimos grandes méritos, que sólo Dios conoce». Jesús enseña con sus palabras, pero sobre todo enseña con sus obras. Aquellos Apóstoles, en un principio duros para entender, después de la Cruz y de la Resurrección, seguirán las mismas huellas de su Señor y de su Dios. Y, acompañados de María Santísima, se harán cada vez más pequeños para que Jesús crezca en ellos y en el mundo.


6 «claves» de Kiko Argüello sobre Pentecostés: «La prueba de nuestro rescate es el Espíritu Santo»


 6 «claves» de Kiko Argüello sobre Pentecostés: «La prueba de nuestro rescate es el Espíritu Santo»

Kiko Argüello

"Es el milagro de la fe. Que el Espíritu de Dios, descendiendo a mi corazón, ha dado testimonio de que Él es Dios, me ha testificado su amor, el Espíritu Santo habitando en el hombre es la garantía de su amor", dice Kiko.

Este domingo –tras 50 días de Pascua–, la Iglesia universal celebra la gran festividad de Pentecostés. Una celebración de primerísimo orden para todos los católicos, con la que se da por concluido, gracias a la venida del Espíritu Santo, este tiempo litúrgico tan importante. 

La festividad de Pentecostés forma junto a la Pascua una unidad que protagonizan la Resurrección de Jesús, la Ascensión y la venida del Espíritu Santo. Es más, gracias a que el Paráclito descendió sobre los discípulos, infundiendo sus siete dones y el valor necesario para anunciar la Buena Nueva, se inicia así la gran obra que es la Iglesia.

En un encuentro público con jóvenes en Madrid, allá por finales de los ochenta, y como preparación para la Jornada Mundial de la Juventud, el coiniciador –junto con la Sierva de Dios Carmen Hernández– del Camino Neocatecumenal, Kiko Argüello, dio una catequesis sobre Pentecostés (que se puede ver en YouTube), de la que hemos extraído seis interesantes claves, que pueden ayudar a muchos a prepararse para esta festividad:

1-Nos testifica que es Dios

- "Cuando estaban reunidos sus discípulos, el día de Pentecostés –que es una fiesta hebrea, 'la fiesta de las semanas', porque conmemora la entrega de la Ley en el monte Sinaí–, de pronto, unas lenguas de fuego se pusieron sobre sus cabezas y sintieron dentro que algo estaba pasando, dentro de ellos mismos sintieron el Espíritu de Dios. Este Espíritu les dio testimonio, les testificó que Aquel con el cual habían estado no era solo el Mesías –una especie de segundo Moisés que iba a liberar al pueblo–, sino que Aquel que había sido muerto y crucificado era Dios mismo". 

2-Partícipes de Su naturaleza

-"Este hecho, de que el Espíritu Santo tocara a los hombres y los transformara –porque el Espíritu mismo de Dios dentro del hombre hace que los hombres sean 'deificados', sean templos de Dios mismo, o sea, que participen de la misma naturaleza divina– era un acontecimiento nuevo. Jamás los hombres habían tenido la gracia de que la naturaleza misma de Dios entrara en ellos y se amalgamara con la naturaleza humana, sin confundirse, en una especie de hipóstasis. Eso que les pasó a aquellos hombres, que los transformó en evangelizadores y que les hizo gritar como locos, es la misma noticia de hoy".

Pentecostes El GrecoLa festividad de Pentecostés forma junto a la Pascua una unidad que protagonizan la Resurrección de Jesús, la Ascensión y la venida del Espíritu Santo (foto: El Greco).



3-Es la garantía de Su amor

-"Lo mismo que aconteció en aquel Pentecostés me ha sucedido a mí, y te sucede hoy a ti. Es el milagro de la fe. Que el Espíritu de Dios, descendiendo a mi corazón, ha dado testimonio de que Él es Dios. Me ha testificado su amor. El Espíritu Santo habitando en el hombre es la garantía de su amor. Cristo nos ha rescatado de la esclavitud al pecado y a la muerte y la prueba de su rescate es el Espíritu Santo. Dios es esto, y ¿sabes lo que es esto? Que Dios te quiere".

4-Ser uno, para que el mundo crea

-"Dios ha dado la vida por tí en Cristo cuando éramos unos malvados. Dios no puede negarse a sí mismo, su naturaleza es ser uno en ti, quiere estar en ti. Dios está en toda la creación, pero quiere estar en ti, no como está en la creación, sino en el Espíritu Santo, como persona, totalmente en ti. Para que participes en el misterio de la Trinidad que es el amor, el misterio de la unidad. 'Padre, Yo en ellos y Tú en mí, para que sean perfectamente uno y el mundo crea. Padre, que el amor con que el me has amado a Mí, esté en ellos'. No se puede separar el amor del padre por el hijo. Si ese amor, que es el Espíritu Santo, está en ti, está también el Hijo. Si yo hoy soy cristiano, está en mí el Padre amándome, está el Hijo y el Espíritu Santo". 

5-Convertirse para dejarlo penetrar   

-"¿Qué es convertirse? Creer que Dios está ahora mismo deseando entrar en ti. ¿Qué es convertirse? Renunciar al pecado, pero no en tus fuerzas, dejar la esclavitud a ti mismo, a ser dios de ti mismo. Conviértete para que el Espíritu Santo pueda penetrar en ti y pueda conducirte al cielo. Convertirse es dejar tu vida en manos de Dios, dejar de ser Dios y de matar a Cristo en ti, porque, si matas a Dios en ti, estás solo, y lo único que puedes hacer es llenar esa soledad de dinero, de pornografía... para continuar estando solo, en una especie de círculo vicioso satánico. Dios es amor y el hombre que está en pecado está solo. La soledad es el infierno. La comunidad es la Iglesia, la Iglesia es una comunión".



Canto al Espíritu Santo del Camino Neocatecumenal. 

6-El depósito de la vida eterna

-"La fe viene por el oído y por la fe viene el Espíritu Santo, cada vez que escucháis el kerigma os abrís un poquito al Espíritu Santo. La Virgen María dice: 'Hágase en Mí lo que Tú dices, yo lo acepto', e, inmediatamente, el Espíritu Santo la cubre con su sombra. Hermanos, Dios os ama, es gratis recibir el Espíritu Santo, es gratis ser santo. El Espíritu Santo nos hace hijos de Dios, nos hace amigos de Dios. Es el depósito de la vida eterna ahora. Nosotros predicamos a Cristo y a Cristo crucificado, escándalo para el mundo, pero, para los que creen, potencia de Dios. Y os anuncio una buena noticia, un día subiréis a la cruz donde está la verdadera felicidad".  

Fuente: Religión en Libertad

lunes, 20 de mayo de 2024

Santo Evangelio 20 de Mayo 2024

 


Texto del Evangelio (Jn 19,25-34):

 Junto a la cruz de Jesús, estaba su madre y la hermana de su madre, María, mujer de Cleofás, y María Magdalena. Al ver a la madre y cerca de ella al discípulo a quien él amaba, Jesús le dijo: «Mujer, aquí tienes a tu hijo». Luego dijo al discípulo: «Aquí tienes a tu madre». Y desde aquel momento, el discípulo la recibió en su casa.

Después de esto, sabiendo Jesús que ya todo estaba cumplido, para que se cumpliera la Escritura, dice: «Tengo sed.» Había allí una vasija llena de vinagre. Sujetaron a una rama de hisopo una esponja empapada en vinagre y se la acercaron a la boca. Cuando tomó Jesús el vinagre, dijo: «Todo está cumplido.» E inclinando la cabeza entregó el espíritu.

Los judíos, como era el día de la Preparación, para que no quedasen los cuerpos en la cruz el sábado - porque aquel sábado era muy solemne - rogaron a Pilato que les quebraran las piernas y los retiraran. Fueron, pues, los soldados y quebraron las piernas del primero y del otro crucificado con él. Pero al llegar a Jesús, como lo vieron ya muerto, no le quebraron las piernas, sino que uno de los soldados le atravesó el costado con una lanza y al instante salió sangre y agua.



«Aquí tienes a tu madre»


Fr. Alexis MANIRAGABA

(Ruhengeri, Ruanda)

Hoy hacemos memoria de María, Madre de la Iglesia. En este sentido, contemplamos la maternidad espiritual de María en conexión con la Iglesia que es —en sí misma— Madre del Pueblo de Dios, pues «nadie puede tener a Dios por Padre si no tiene a la Iglesia por Madre» (San Cipriano). María es Madre del Hijo de Dios y a la vez Madre de aquellos que aman a su Hijo y los “bien-amados” de su Hijo, en conformidad con aquel «Mujer, aquí tienes a tu hijo; discípulo: Aquí tienes a tu madre» (Jn 19,26-27), tal como dijo Jesús. Entregando su cuerpo a los hombres y devolviendo su espíritu a su Padre, Jesucristo incluso dio su Madre a sus amigos.

Y el amor más grande es aquel con el que Jesús ama a la Iglesia (cf. Ef 5,25), a la que pertenecen sus amigos. Por lo tanto, los hijos adoptados por Dios no pueden tener a Jesús por hermano si no tienen a María como Madre porque, mientras María ama a su Hijo, ama a la Iglesia de la cual Ella es miembro eminente. Lo que no significa que María sea superior a la Iglesia, sino que Ella es «madre de los miembros de Cristo» (San Agustín).

El Concilio Vaticano II añade que María es «verdaderamente madre de los miembros de Cristo por haber cooperado con su amor a que naciesen en la Iglesia los fieles, que son miembros de aquella Cabeza (Jesús)». Además, permaneciendo en medio de los Apóstoles en el Cenáculo (cf. Hch 1,14), María —Madre de la Iglesia— nos recuerda la presencia, el don y la acción del Espíritu Santo en la Iglesia misionera. Al implorar al Espíritu Santo en el corazón de la Iglesia, María ora con la Iglesia y ora por la Iglesia, porque «asunta ya en la gloria del cielo, acompaña y protege a la Iglesia con su amor maternal» (Prefacio de la misa “María, Madre de la Iglesia”).

María cuida a sus hijos. Podemos, pues, confiarle toda la vida de la Iglesia, como hizo el papa san Pablo VI: «¡Oh, Virgen María, augusta Madre de la Iglesia, te encomendamos toda la Iglesia y el concilio ecuménico!».

Baby Lasagna, segundo en Eurovisión: «Recibí una respuesta de Dios, que me decía: 'Tú eres mío'»



 Baby Lasagna, segundo en Eurovisión: «Recibí una respuesta de Dios, que me decía: 'Tú eres mío'»

Marko Purišić

"Yo era mi propio dios, todo estaba subordinado a mí. Y, dentro, ¿qué había? Oscuridad, quebrantamiento y tristeza. A veces lloraba durante días", comenta el cantante (foto: Instagram/@the_baby_lasagna_).

Marko Purišić, que acaba de ser subcampeón de Eurovisión con Croacia, tenía una exitosa carrera de músico a sus 25 años. Actuaba para miles de personas y era un compositor muy solicitado. Sin embargo, un gran vacío lo invadía por dentro, hasta que una conversión lo cambió todo. La revista croata Bitno lo ha entrevistado recientemente.

Más conocido por su nombre artístico de Baby Lasagna, Purišić lanzó la canción Rim Tim Tagi Dim –que habla de un joven que se marcha del campo a la ciudad– a principios de este año. Ganó un concurso nacional de música en Croacia, y acabó representando a su país en el Festival Eurovisión 2024, donde ha quedado en segundo lugar.

Es el mejor resultado de la historia de Croacia en Eurovisión, y en su país le han recibido como un héroe. El primer ministro, Andrej Plenkovic, ha anunciado que el Estado le otorga un premio de 50.000 euros. Él ha renunciado a ese dinero, pide que se entregue a la lucha contra el cáncer, al Instituto de Oncología y Hematología Pediátrica del hospital Mladen Ćepulić y al Instituto de Hematología, Oncología y Trasplante del Hospital Pediátrico de Zagreb.

La ayuda de un sacerdote

Desde su conversión hace unos años, Purišić asegura que sabe distinguir muy bien entre la felicidad que da el éxito de un concurso musical y la verdadera alegría que proviene de seguir a Cristo. Aunque, hace apenas unos años, ese no era el caso.

"Yo era mi propio dios, todo estaba subordinado a mí. Y, dentro, ¿qué había? Oscuridad, quebrantamiento y tristeza. A veces lloraba durante días", comenta el cantante. "No podía estar rodeado de gente, me aislaba en mi apartamento. Tenía mucha presión, como si mi corazón estuviera siendo apretado sin piedad por el puño de otra persona. Estaba cansado, desesperado, y me deprimí", relata. 

Hasta que esa pesadez se volvió insoportable, y el joven llamó a su padre, quien lo llevó a conocer a un sacerdote amigo cercano. Esa conversación marcaría un punto de inflexión para Purišić. "La oscuridad comenzó a desaparecer lentamente, y la felicidad y un sentimiento de plenitud fueron retomando su lugar", comenta. 

"Por primera vez quise escuchar lo que me decía la Iglesia y no sólo hablar. ¿Qué quieres decirme, Dios? ¿Cómo puedes ayudarme? Y, entonces, recibí una respuesta. No fue una grabación de audio, fue más bien una certeza en mi corazón, con el que Dios me hizo saber: 'Tú eres mío'", confiesa el artista croata.


Marko PurisicEsa pesadez se volvió insoportable, y el joven llamó a su padre, quien lo llevó a conocer a un sacerdote amigo (foto: Instagram/@the_baby_lasagna_).

"Dios se acababa de convertir para mí en una persona viva. Cuando recuerdo esas palabras, me pongo a llorar", dice. Nacido en Umag, Croacia, Purišić creció asistiendo regularmente a la iglesia con sus padres. Pero, aunque seguía lo que decía la Iglesia, veía el catolicismo como una especie de folclore destinado a darle simplemente buena suerte.

"Iba a la iglesia, pero me comportaba como me apetecía. Incluso cuando rezaba, siempre estaba pensando en mis deseos y necesidades", recuerda. En un momento, el croata formó parte de una banda de música con iconografía muy anticristiana. Hasta que tomó la decisión de abrazar la fe y supo que tendría que renunciar a ciertos elementos de su vida.

"Dejé de escuchar algunas bandas que me gustaban mucho, especialmente aquellas que tenían canciones contra Jesús. Todo eso sucedió de forma natural, al igual que un culturista que quiere ganar un concurso y renuncia a la pizza. Simplemente no podíamos ir de la mano. No perdí nada, lo gané todo. Con Dios me recuperé", comenta.

Sin embargo, vivir la fe no iba a significar que sus problemas fueran a desaparecer. "Después de mi conversión pensé ingenuamente que mi vida sería más fácil. La oscuridad desapareció de mi corazón, fue reemplazada por la luz, pero todavía había algo de sufrimiento", confiesa.

Emocionado con The Chosen

"Yo esperaba que Dios fuera una especie de administrador, que dirigiera mi vida y solucionara mis problemas, pero encontré grandes desafíos y luchas. Aunque, creo que estoy logrando avances en esa luchas", explica. Purišić admite también que tiene la sensación de que su tiempo para Dios se le escapa debido a sus obligaciones como artista. 

Por eso, a menudo se pregunta si este tipo de vida es el indicado para él. "Siempre fue un sueño para mí ganarme la vida haciendo música, pero a veces no estoy seguro de si esa es la voluntad de Dios para mí", admite.

"Además de la música, a mí me inspiran los santos, su sencillez y su pobreza, así que me pregunto si se pueden combinar ambas cosas. Tal vez sea necesario aportar algo que no sea simplemente sexo, drogas y canciones baratas a este lodo que llamamos música. Eso es lo siguiente que discutiré con mi padre espiritual", comenta el croata.

Al hablar de santos, Purišić dice que sus modelos son San Padre Pío y San Pablo. También se inspira en los clásicos de la literatura rusa, como Dostoyevski, y en la música clásica. Y, a pesar de las exigencias de su carrera musical, se preocupa por alimentar su fe. "Leo varios versículos de la Biblia todas las mañanas, creo que es importante conocer Su Palabra. También escucho música cristiana y veo The Chosen, cada episodio me hace llorar", explica.



 Puedes ver aquí la actuación de Croacia en el pasado Eurovisión.

"En realidad, encuentro cosas que me consuelan en todas partes. Aunque, la Eucaristía es lo más importante para mí", dice. Mientras continúa discerniendo su futuro, su atención se centra en su objetivo final. "Me gustaría ser como esos santos que quisieron morir por su Señor. Como San Pedro, que pidió ser crucificado cabeza abajo", afirma. "Hay una voz dentro de mí que me dice que no soy lo suficientemente valiente ni fuerte. Pero hay otra voz más fuerte que dice: 'No temáis'", concluye.

Baby Lasagna actuará en directo en España en el Festival Brava, que se celebrará los días 20 y 21 de septiembre en Madrid, con otros músicos del entorno eurovisivo. 

Fuente: Religión en Libertad

domingo, 19 de mayo de 2024

Santo Evangelio 19 de Mayo 2024

 


Texto del Evangelio (Jn 20,19-23):

 Al atardecer de aquel día, el primero de la semana, estando cerradas, por miedo a los judíos, las puertas del lugar donde se encontraban los discípulos, se presentó Jesús en medio de ellos y les dijo: «La paz con vosotros». Dicho esto, les mostró las manos y el costado. Los discípulos se alegraron de ver al Señor. Jesús les dijo otra vez: «La paz con vosotros. Como el Padre me envió, también yo os envío». Dicho esto, sopló sobre ellos y les dijo: «Recibid el Espíritu Santo. A quienes perdonéis los pecados, les quedan perdonados; a quienes se los retengáis, les quedan retenidos».



«Recibid el Espíritu Santo»


Mons. José Ángel SAIZ Meneses, Arzobispo de Sevilla

(Sevilla, España)

Hoy, en el día de Pentecostés se realiza el cumplimiento de la promesa que Cristo había hecho a los Apóstoles. En la tarde del día de Pascua sopló sobre ellos y les dijo: «Recibid el Espíritu Santo» (Jn 20,22). La venida del Espíritu Santo el día de Pentecostés renueva y lleva a plenitud ese don de un modo solemne y con manifestaciones externas. Así culmina el misterio pascual.

El Espíritu que Jesús comunica, crea en el discípulo una nueva condición humana, y produce unidad. Cuando el orgullo del hombre le lleva a desafiar a Dios construyendo la torre de Babel, Dios confunde sus lenguas y no pueden entenderse. En Pentecostés sucede lo contrario: por gracia del Espíritu Santo, los Apóstoles son entendidos por gentes de las más diversas procedencias y lenguas.

El Espíritu Santo es el Maestro interior que guía al discípulo hacia la verdad, que le mueve a obrar el bien, que lo consuela en el dolor, que lo transforma interiormente, dándole una fuerza, una capacidad nuevas.

El primer día de Pentecostés de la era cristiana, los Apóstoles estaban reunidos en compañía de María, y estaban en oración. El recogimiento, la actitud orante es imprescindible para recibir el Espíritu. «De repente, un ruido del cielo, como de un viento recio, resonó en toda la casa donde se encontraban. Vieron aparecer unas lenguas, como llamaradas, que se repartían, posándose encima de cada uno» (Hch 2,2-3).

Todos quedaron llenos del Espíritu Santo, y se pusieron a predicar valientemente. Aquellos hombres atemorizados habían sido transformados en valientes predicadores que no temían la cárcel, ni la tortura, ni el martirio. No es extraño; la fuerza del Espíritu estaba en ellos.

El Espíritu Santo, Tercera Persona de la Santísima Trinidad, es el alma de mi alma, la vida de mi vida, el ser de mi ser; es mi santificador, el huésped de mi interior más profundo. Para llegar a la madurez en la vida de fe es preciso que la relación con Él sea cada vez más consciente, más personal. En esta celebración de Pentecostés abramos las puertas de nuestro interior de par en par.


Año duro de bombardeos en Járkov: así se ha organizado la catedral católica, con oración y ayudas


 Año duro de bombardeos en Járkov: así se ha organizado la catedral católica, con oración y ayudas

Catequesis en la catedral grecocatólica de Járkov, en abril de 2024, mes de bombardeos intensos

Antes de la guerra, Járkov era la segunda mayor ciudad de Ucrania, con quizá 2 millones de personas si se contaba su área metropolitana. A tan sólo 40 km de Rusia, el 80% de su población habla ruso en casa, aunque sólo un tercio se declaraba étnicamente ruso. Llena de hijos y nietos de obreros soviéticos, Járkov era de las zonas menos cristianas y menos católicas de Ucrania. 

Tras un año relativamente tranquilo en 2023, cuando volvió 1 millón de personas que había huido al empezar la guerra (muchos llegaron a España, y volvieron de ella), en 2024 el Ejército ruso ha insistido en volver a bombardear la ciudad desde hace meses. El 22 de abril un misil ruso golpeó a plena luz del día la torre de televisión, derribando su mástil de 240 metros. Las 3 principales centrales eléctricas han sido destruidas, pero los jarkovitas se las arreglan con unas pocas horas de electricidad al día.

Más de cien escuelas han sido dañadas o destruidas, pero los niños van a clase bajo tierra, en muchas de sus sus 30 estaciones de metro. Ha habido bombas dirigidas a las casernas y almacenes de bomberos, y en secuencias, contra los equipos de rescatistas, pero el subjefe de bomberos de la ciudad, Andrii Dronov, decía en abril en The New York Times: "Cuando cae un cohete, en tres o cuatro horas se limpian todos los cristales y se despejan todas las carreteras del centro. Por la mañana, parece que no ha pasado nada y que no ha habido explosiones".

Desde marzo, Rusia usa un arma nueva y devastadora: bombas planeadoras, que son bombas guiadas lanzadas desde aviones de guerra, que liberan cientos de kilos de explosivos en una sola detonación. Pueden llegar a 100 km de distancia.

Y a mediados de mayo, hay ya asaltos de infantería rusos contra Vovchansk, a unas decenas de kilómetros de la gran ciudad, que dejan un reguero de muertes. En abril, el ministro de Asuntos Exteriores ruso, Serguéi Lavrov, adelantó en público que Moscú quiere apoderarse de Járkov para que sea el centro de una "zona de seguridad" a lo largo de la frontera rusa. Ya han ocupado unas diez aldeas y al menos 6.000 civiles han huido de esa zona.



Colas para recoger ayudas en la catedral grecocatólica de Járkov en abril de 2024.

La catedral grecocatólica: punto de reparto de ayuda

¿Qué hacen los católicos en Járkov? La diócesis grecocatólica es enorme en territorio (del tamaño de Andalucía) pero tiene sólo unos 6.000 católicos. Su catedral, dedicada a San Nicolás Taumaturgo (el que trae regalos a los niños, además de hacer muchos milagros), es un centro de reparto de todo tipo de ayudas, materiales y espirituales.

Cuenta con unos cien voluntarios, todos de la ciudad, que se dedican a eso. Muchos de ellos recibieron ayuda en su momento, al empezar la guerra, y ahora están incorporados a los equipos de acción.

Hace 10 años, en abril de 2014, el año que Rusia se anexionó Crimea y empezaron los disparos en Donetsk y Lugansk, la Iglesia Grecocatólica (católicos unidos a Roma, pero de rito griego) crearon la diócesis (exarcado) de Járkov, con el sacerdote Vasyl Tuchapets como su primer obispo. La catedral está inacabada y lo estará mientras haya guerra.

"Llegué a Járkov en 2014, y la encontré como una ciudad soviética secularizada, no demasiado amigable. Pero poco a poco me acostumbré a ella, y ella se fue liberando de cadenas de propaganda rusa", dice el obispo en un reportaje publicado en abril en la web de la Iglesia.

Al principio, la mayoría de los parroquianos grecocatólicos eran galitzios, es decir, gente de la región occidental de Halych (la Galitzia ucraniana), entre los Cárpatos y Leópolis/Lvov. Poco a poco la catedral grecocatólica fue incorporando parroquianos de entre la población autóctona. Luego llegó la guerra: la gente con familia en Halych y el Oeste se mudó allí. Y a la parroquia empezaron a llegar muchos conciudadanos que ni siquiera eran muy creyentes, ni católicos, pero que acudieron a ofrecer su trabajo y ánimos, a colaborar en muchas tareas.

Por ejemplo, con escuelas y guarderías cerradas en la ciudad, en la parroquia hay niños todo el día: se les ofrece catequesis, clases de refuerzos, o simplemente juegos.

Por supuesto, para quien quiera liturgia, hay mucha: cada día, a las siete y media de la mañana, hay canto de maitines, con el matrimonio de Mykola y Katya y más feligreses en el coro diario. Y liturgia también cada día a las cinco de la tarde. De hecho, durante toda la guerra, el culto se ha mantenido cada día en el templo, y el obispo ha permanecido en la catedral atendiendo a la gente (también ha visitado las otras parroquias, aunque las que están en zona rusa no tienen clero ni culto y no se pueden atender).

En la catedral de San Nicolás se reza por los difuntos y se conmemora a los caídos. El 11 de mayo, Sábado Santo para el calendario bizantino ("Sábado Brillante" se llama en Ucrania) el obispo bendijo en una ceremonia una placa en el patio ante la catedral que conmemora a 8 soldados católicos de Járkov caídos en la guerra: el mayor de ellos nació en 1960, el más joven nació en 2001.


El obispo Vasyl bendice una placa que recuerda a 8 soldados grecocatólicos de Járkov caídos en la guerra

Descargar los camiones con ayuda

El padre Serhii Tymchuk usa una miniván (microfurgoneta) para repartir material humanitario. La ayuda llega a la catedral en camiones, por ejemplo, desde la iglesia grecocatólica de Roma, Santa Sofía, donde los refugiados y emigrantes ucranianos recogen ayudas de toda Italia.


El obispo Vasyl Tuchapets en el reparto de ayudas en la catedral grecocatólica de Járkov en abril de 2024.

Los voluntarios se organizan cuando llega un camión y descargan cajas de comida, medicinas, material de higiene, cosas para niños... Las mujeres clasifican la ropa. El obispo Tuchapets, en esas ocasiones, aprovecha para filmar un video mostrando que la ayuda llega, que se agradece, y dando un mensaje de fe a los donantes.

En Járkov muchos han visto ya bombas muy de cerca, incluyendo al obispo. "El Jueves Santo de 2022, 21 de abril, los rusos bombardearon Járkov con munición de racimo. Por la noche, estaba hablando por teléfono en la cocina cuando escuché una explosión. El proyectil explotó en el aire y los escombros cayeron en nuestro jardín. Uno de ellos cayó en la alfombra de mi dormitorio", explica el jerarca. La zona residencial destruida en los bombardeos de primavera de 2022 sigue sin reconstruirse.

En la catedral los voluntarios llevan ya dos años de trabajo y tienen rutinas bien establecidas: primero entregan cupones; después, a las once, dejan pasar a las personas y reparten ayudas según los cupones. Además, hay colas separadas para personas con discapacidad y padres con niños pequeños. Hablan, con humor, de la cola para "veteranos de la Batalla de Borodino" (refiriéndose a la famosa batalla napoleónica), que es a la que acuden ancianos, que a veces recuerdan su infancia en la Segunda Guerra Mundial.

"Al principio distribuíamos comida todos los días, luego tres veces por semana y ahora una vez", decía el obispo en abril. "Las colas para conseguir medicamentos son las más grandes: la gente pide medicamentos para la presión arterial, analgésicos y contra el resfriado".


El obispo Vasyl Tuchapets con los niños de catequesis en la catedral grecocatólica de Járkov en abril de 2024

El obispo Vasyl Tuchapets con los niños y las catequistas; con las escuelas y guarderías cerradas, y muchos hombres en el frente, madres y niños pasan mucho tiempo en la parroquia.

El equipo de la farmacia

La parroquia cuenta con su propio equipo de profesionales en la tienda de los medicamentos: un neonatólogo con 52 años de experiencia, un docente de la Universidad Nacional Farmacéutica, un farmacéutico. "Aquí tenemos preparados de hierro, vitaminas del grupo B, aquí antitusivos, paracetamol... Todos los medicamentos están firmados, con explicaciones de qué, cuándo y cómo tomar", explica una de las voluntarias de farmacia.

Cuando la gente ve venir al obispo Vasyl, acuden a él con preguntas, le piden bendiciones y a veces le plantean todo tipo de inquietudes. "El domingo, una mujer de unos 90 años se me acercó y me dijo: "señor obispo, no dormí en toda la noche. Ore para que pueda dormir al menos un poco", sonríe el prelado.

Muchos jarkovitas a la vez agradecen y se escandalizan al comprobar que se han acostumbrado a las explosiones y bombardeos, que suelen ser de las diez de la noche a la una de la madrugada. Dicen que no les dan ya miedo, que les da más miedo no tener macarrones para los niños.

Un documental sobre San Nicolás en guerra

El día a día en la catedral de San Nicolás lo ha recogido recientemente la periodista televisiva Tetyana Babina, en su documental breve "La misericordia como sentido de la vida", que presentó oficialmente el 12 de mayo en la catedral misma.

En el documental, hay personas que constatan que con cruzar las puertas de la iglesia ya sienten paz y seguridad, en un mundo donde las bombas no dejan de resonar.

Otros agradecen la ayuda que llegó de tantos países, de católicos de todo el mundo, y la que aún sigue llegando al patio de la catedral, con una gestión más que eficaz. Otros cuentan cómo organizaron el envío de ropa de abrigo al frente. O cómo padres y maestros se coordinaron para atender a los niños. La pasada Navidad se celebró con infinidad de villancicos y canciones infantiles muy ensayadas.

El obispo señala también que los templos hoy están abiertos para las personas que tienen que orar por sus seres queridos, los que han muerto recientemente y los que están en peligro. "La iglesia mantiene la fe y el espíritu de la gente y es importante que el sacerdote se quede con los creyentes en el templo, que no abandone la parroquia", explica el obispo, aunque varios de sus sacerdotes no pueden entrar en la zona de control ruso. Cree que los sacerdotes ucranianos, endurecidos por la prueba de la guerra, probados a fuego, tienen mucho que ofrecer a Europa.

(Fotos del reportaje de Oleksandr Savranskyi).

Desde España es posible ayudar a las víctimas y desplazados a través de Cáritas Española, que colabora con las dos Cáritas ucranianas (la latina y la grecocatólica). La cuenta es:  Caixabank ES31 2100 5731 7502 0026 6218. Hay una web para donativos AQUÍ. 

El documental breve "La misericordia como sentido de la vida" de Tetyana Babina, en ucraniano:


Fuente: Religión en Libertad

sábado, 18 de mayo de 2024

Santo Evangelio 18 de Mayo 2024

 


Texto del Evangelio (Jn 21,20-25):

 En aquel tiempo, volviéndose Pedro vio que le seguía aquel discípulo a quién Jesús amaba, que además durante la cena se había recostado en su pecho y le había dicho: «Señor, ¿quién es el que te va a entregar?». Viéndole Pedro, dice a Jesús: «Señor, y éste, ¿qué?». Jesús le respondió: «Si quiero que se quede hasta que yo venga, ¿qué te importa? Tú, sígueme». Corrió, pues, entre los hermanos la voz de que este discípulo no moriría. Pero Jesús no había dicho a Pedro: «No morirá», sino: «Si quiero que se quede hasta que yo venga».

Éste es el discípulo que da testimonio de estas cosas y que las ha escrito, y nosotros sabemos que su testimonio es verdadero. Hay además otras muchas cosas que hizo Jesús. Si se escribieran una por una, pienso que ni todo el mundo bastaría para contener los libros que se escribieran.



«Las ha escrito, y nosotros sabemos que su testimonio es verdadero»


Rev. D. Fidel CATALÁN i Catalán

(Terrassa, Barcelona, España)

Hoy leemos el final del Evangelio de san Juan. Se trata propiamente del final del apéndice que la comunidad joánica añadió al texto original. En este caso es un fragmento voluntariamente significativo. El Señor Resucitado se aparece a sus discípulos y los renueva en su seguimiento, particularmente a Pedro. Acto seguido se sitúa el texto que hoy proclamamos en la liturgia.

La figura del discípulo amado es central en este fragmento y aun en todo el Evangelio de san Juan. Puede referirse a una persona concreta —el discípulo Juan— o bien puede ser la figura tras la cual puede situarse todo discípulo amado por el Maestro. Sea cual sea su significación, el texto ayuda a dar un elemento de continuidad a la experiencia de los Apóstoles. El Señor Resucitado asegura su presencia en aquellos que quieran ser seguidores.

«Si quiero que se quede hasta que yo venga» (Jn 21,22) puede indicar más esta continuidad que un elemento cronológico en el espacio y el tiempo. El discípulo amado se convierte en testigo de todo ello en la medida en que es consciente de que el Señor permanece con él en toda ocasión. Ésta es la razón por la que puede escribir y su palabra es verdadera, porque glosa con su pluma la experiencia continuada de aquellos que viven su misión en medio del mundo, experimentando la presencia de Jesucristo. Cada uno de nosotros puede ser el discípulo amado en la medida en que nos dejemos guiar por el Espíritu Santo, que nos ayuda a descubrir esta presencia.

Este texto nos prepara ya para celebrar mañana domingo la Solemnidad de Pentecostés, el Don del Espíritu: «Y el Paráclito vino del cielo: el custodio y santificador de la Iglesia, el administrador de las almas, el piloto de quienes naufragan, el faro de los errantes, el árbitro de quienes luchan y quien corona a los vencedores» (San Cirilo de Jerusalén).


Alejados de la fe, quedaron conmovidos por la música y la ciencia, la belleza y unidad de la Iglesia



 Alejados de la fe, quedaron conmovidos por la música y la ciencia, la belleza y unidad de la Iglesia

Shannon Gallup y Elvis Tafoya-Turoldo.

'Estás buscando lo mismo, a Dios, y eso alinea el camino de tu vida, trabajamos juntos en ese camino. Las cosas son mucho más fáciles cuando tienes una fe común', opina esta pareja de novios conversos.

Con 1.350 nuevos católicos en plena comunión con la Iglesia, la archidiócesis de Washington es una de las que más conversiones y regresos a la fe han registrado este año en los Estados Unidos. En el caso de Elvis Tafoya-Turoldo, asistente de un miembro del Congreso en Washington, y Shannon Gallup, estudiante de Medicina en Florida, la conversión de él y el regreso a la fe de ella pasaron por un periodo de estudio de la fe que terminó por ser "parte esencial de la relación". Tras una larga relación, cuentan a Catholic Standard, su conversión simultánea les ha llevado a asentar un nuevo pilar en su noviazgo, "estar de acuerdo en lo más importante, la fe".

Tafoya-Turoldo cuenta que si bien sus padres de raíces mexicanas y argentinas tenían orígenes católicos, su madre abandonó la Iglesia para hacerse evangélica a los 12 años y él fue bautizado y criado como bautista desde que nació en California.

El joven nunca abandonó su creencia en Dios. Sin embargo, durante sus estudios de Ciencias Políticas en la Universidad de California, empezó a cuestionar los fundamentos de su iglesia para "saber todo lo que había".

"Debía buscar la fe verdadera, no la que me convenía"

Inmerso en un periodo de búsqueda, estudió en profundidad las doctrinas y filosofías hinduistas y estoicas. Sin embargo, más tarde sabía que "estaba eligiendo la religión adecuada" para él, "no la correcta".

"Debí haber buscado la que fuera más verdadera, no la que más me convenía", declaró al Standard.

Pero en pleno estudio de las religiones, incluido el catolicismo que configuró sus raíces familiares, dio con un nombre en su árbol genealógico, David María Turoldo, un famoso sacerdote dominico en Italia fallecido en 1992 conocido por sus escritos y poesía. Pronto supo que Turoldo no fue el único sacerdote o miembro de la familia entregado a la Iglesia.



David María Turoldo.

El sacerdote, teólogo, filósofo, escritor, poeta y miembro de la orden de los Siervos de María, David María Turoldo.

"Leí sobre su vida y su filosofía me habló. [Hablaba de] estar en el mundo sin ser del mundo. Me conmovió y me hizo pensar. Llegó un momento, alrededor de junio de 2023, que fue como un choque de trenes y decidí que iba a hacerlo, convertirme en católico", comenta.

La  vida del sacerdote dominico no fue lo único que motivó su conversión. También tuvo que ver la obra de otro histórico personaje.

"Soy un gran admirador de las Misas de Bach, su música coral, la Misa en si menor o la Pasión según San Mateo. Escuché tanto y durante tantos años la música católica que de alguna manera se hizo parte de mí. Llegó un momento en el que, conduciendo de vuelta del trabajo, vi una iglesia católica, paré, me senté frente a una estatua de la Virgen María y se me cayó una lágrima `Supongo que ahora soy católico´", pensó.

Lo diferencial: María, la unidad y la comunidad

¿Por qué católico y no protestante? Entre los principales motivos, menciona el énfasis católico en la justicia y la misericordia de Dios, así como la importancia de María. También la belleza de las Iglesias, de las que siempre pensó que "debían ser bonitas por el respeto que muestra". Otro factor diferencial es la unidad, "habiendo solo una Iglesia católica pero muchas protestantes".

"Me gusta que todas las misas católicas sean iguales en todo el mundo, que recitemos el Padrenuestro y otras oraciones al unísono. Eso [también] satisface una necesidad primordial de querer sentir que formamos parte de la comunidad. Nuestra sociedad es muy  individualista, todo el mundo está desconectado entre sí y es un soplo de aire fresco [ver que] todos dicen la misma oración, viven en la misma longitud de onda, en sintonía con el mismo Dios", opina.

Tafoya-Turoldo cree que la Iglesia está asistiendo a un "avivamiento silencioso", por el que "mucha gente se está uniendo" en los últimos tiempos.

 "Tiene que haber algo más que ciencia"

Precisamente su novia Shannon también sufrió ese avivamiento de una fe de la que apenas tiene recuerdos. Cuenta que más allá de su bautismo no la educaron en el modo de vida ni en la práctica cristiana, sino que fue también durante sus estudios en Medicina cuando se replanteó  su fe y creencias.

Acostumbrada a tratar con heridos y enfermos, sabe bien que "muchas preguntas sobre la vida no pueden responderse desde la ciencia". Aunque eso no implica que la ciencia "no tenga su validez", empezó a preguntarse cómo podría ayudar a esas personas "cuando las cosas se pusieran difíciles".

"Conforme empiezas a meterte en sus situaciones y a hablar con diferentes personas, tienes que creer que hay algo más en la vida. Tienes que creer en Dios", dice.  

También ella se encontraba "necesitada de significado" en su día a día. La ocasión perfecta de dar respuesta a su  inquietud fue cuando Elvis le dijo que quería ir a misa el domingo y ella no dudó en su respuesta. "Yo iré".

Nada más decirlo, "sentí como si todo hiciera click, él se iba acercando [a la fe]  y yo necesitaba respuestas. Empezamos a ir a misa y fue maravilloso unirnos a eso como pareja", saber que "cuando te unes a algo, no lo haces solo".

En casa

Valora su regreso a la fe como algo "realmente agradable", también como su novio Elvis por poder encotrarse en una comunidad donde "a la gente no solo le importa tu carrera".

"Voy a la Iglesia y me preguntan cómo estás. Es agradable estar rodeado de gente a las que les importas por ti y tu conexión con Dios, tener una comunidad cuidándote. Mucha gente de mi generación se siente sola y perdida, [pero en la Iglesia] siendo que tengo abuelos adoptivos que se preocupan por mí", comenta.

Tras su avivamiento, la joven se muestra convencida de que la fe también ha fortalecido su relación, porque "al compartirla, te alinea. Estás buscando lo mismo, a Dios, y eso alinea el camino de tu vida, trabajamos juntos en ese camino. Las cosas son mucho más fáciles cuando tienes una fe común y es el centro de tu vida".

Tafoya-Turoldo se expresa en los mismos términos. Su conversión, dice, es "como si hubiera vuelto a casa. Estoy en casa. Es precioso que ella y yo, que pensamos diferente sobre las mismas cosas, estemos de acuerdo en lo más importante: la fe".

Fuente: Religión en Libertad

viernes, 17 de mayo de 2024

Santo Evangelio 17 de Mayo 2024

 


Texto del Evangelio (Jn 21,15-19):

 Habiéndose aparecido Jesús a sus discípulos y comiendo con ellos, dice Jesús a Simón Pedro: «Simón de Juan, ¿me amas más que éstos?» Le dice él: «Sí, Señor, tú sabes que te quiero». Le dice Jesús: «Apacienta mis corderos». Vuelve a decirle por segunda vez: «Simón de Juan, ¿me amas?». Le dice él: «Sí, Señor, tú sabes que te quiero». Le dice Jesús: «Apacienta mis ovejas».

Le dice por tercera vez: «Simón de Juan, ¿me quieres?». Se entristeció Pedro de que le preguntase por tercera vez: «¿Me quieres?» y le dijo: «Señor, tú lo sabes todo; tú sabes que te quiero». Le dice Jesús: «Apacienta mis ovejas. En verdad, en verdad te digo: cuando eras joven, tú mismo te ceñías, e ibas a donde querías; pero cuando llegues a viejo, extenderás tus manos y otro te ceñirá y te llevará a donde tú no quieras». Con esto indicaba la clase de muerte con que iba a glorificar a Dios. Dicho esto, añadió: «Sígueme».



«¿Me amas más que éstos?»


Rev. D. Habel JADERA

(Bogor, Indonesia)

Hoy, el Evangelio nos narra otra de las apariciones de Jesús a sus discípulos. De un modo profundo, el diálogo entre el Señor y Pedro nos muestra la misericordia de Dios como su gran amor por los discípulos y el mundo. Éste no es un diálogo cualquiera entre Jesús y su discípulo Pedro. Ambos, Jesucristo y Pedro, hablan de amor, cada uno desde su perspectiva. Las tres preguntas de Jesús: «¿Me amas más que éstos?» (Jn 21,15) pueden ser consideradas como una reafirmación del doble estatus de Pedro, a saber: por un lado, como un discípulo que le ama más que los otros, y, por otro, como un discípulo que le ama a Él más que a sus compañeros. En todo caso, el gran acto de amor de Jesucristo apremia a una profunda respuesta por parte de Pedro.

Respondiendo «Sí, Señor, tú sabes que te quiero», Simón parece tomar conciencia de sus tres caídas negando a Jesús, el Hijo de Dios que permanece ante él y que dice a los discípulos «no se turbe vuestro corazón», «la paz esté con vosotros» (cf. Jn 14,27; 20,19).

Jesús concluye este diálogo tan importante con la confirmación de la misión de Pedro y del primado que ya le había otorgado anteriormente (cf. Mt 16,18-20), especialmente, cuando Cristo le dice «Apacienta mis ovejas». El cumplimiento de los encargos de Jesús requiere un amor extraordinario, un amor misionero en el alma. Este amor misionero debe ir “in crescendo”. Tal como afirmó el Papa Francisco, «el amor crea vínculos y expande la existencia cuando saca a la persona de sí misma hacia el otro».

Para llegar a ser sus pastores, Jesucristo exige la siguiente característica básica del amor misionero: amarle más que a nadie. Finalmente, como discípulos de Jesús, se nos pide hacer operativa la “ley de éxtasis”. Es decir, el amante debe «salir de sí mismo para hallar el crecimiento de su ser en el otro» (Francisco). ¡El amor misionero nos mueve a ir más allá de nosotros mismos!

De darlo en adopción, a reencontrarlo cuando iba a ser cura: «Dios te ama, mamá, me dijo, y le creí»



 De darlo en adopción, a reencontrarlo cuando iba a ser cura: «Dios te ama, mamá, me dijo, y le creí»

Laura con su hijo

"Cuando regresé a casa, seguí pensando en esa historia. Si el Creador del universo me ama, probablemente quiera conocerme. Y probablemente quiera que lo conozca. Entonces hice lo mismo que el amigo de Stephen", dice Laura.

Laura Richards descubrió a Dios a sus cuarenta años, después de haber vivido el dolor de haber quedado embarazada en la adolescencia y tener que dar a su hijo en adopción. Más de dos décadas después de aquel trauma se reencontró con un joven, que por aquel entonces se preparaba para ser sacerdote.

"Cuando era adolescente fui a hacerme la prueba de embarazo. Recuerdo sentir el miedo de tener que contárselo a mis padres y a mi novio, y la vergüenza de enfrentarme con sus padres", cuenta Laura Richards en The Coming Home Network.

"He pensado en ti durante 23 años" 

"Solía recordar el nacimiento de mi hijo, abrazarlo y luego tener que darlo en adopción. Recordaba los sentimientos de dolor y pérdida durante 23 años separados, y pensaba en la alegría abrumadora que sería nuestro reencuentro. Supe por primera vez que Dios estuvo allí cuando estaba embarazada y lo tuve que dar en adopción. Este niño, a quien salvé, regresó y me salvó a mí; todo eso estaba en el plan del Señor", comenta Laura.

"Un martes después del trabajo, mi esposo salió a recoger el correo. La carta decía que tenía derecho a conocer la información sobre el niño que había dado en adopción cuando era un adolescente. Gracias a Dios estaba sentada, si no me habría desplomado. La primera página incluía el nombre y el número de teléfono de mi hijo. Las siguientes contenían una copia de su partida de nacimiento", explica Laura.

"Me sentía en shock. Había pasado los últimos 23 años pensando en este hijo. Darlo en adopción fue una decisión muy difícil que me marcó y dejó en mí heridas con las que luché seriamente durante varios años. Solía mirar a los niños pequeños en las tiendas, buscando a alguien que se pareciera a mí", relata.

"Llegué a calcular si se habría graduado en el instituto, y hojeaba los periódicos para ver si alguno de los graduados se parecía a mi antiguo novio. Pasé años soñando con esto. Así que imagínate ahora... teniendo su nombre y su número de teléfono en mis manos. Mi marido me dijo: '¡Espera! ¿Estás segura de que estás preparada para esto? ¿Sabes lo que vas a decir?'. Marqué el número y me saltó el buzón de voz. Pensé: 'No creo que se pueda decir por mensaje', así que colgué", recuerda.

"Entonces abrí mi ordenador, y escribí un correo electrónico: '¿Eres el Stephen que fue adoptado por Sean y Tanya? Si es así, soy tu madre biológica y llevo esperando 23 años y 8 días para hablar contigo'. Envié el correo electrónico, y por la mañana tenía una respuesta esperándome: 'Sí, soy el Stephen adoptado por Sean y Tanya, ¡y he pensado en ti durante 23 años y 9 días! Eres mi mejor regalo de cumpleaños'", comenta Laura.

"¡No te puedes imaginar mi alegría! Quedamos para hablar por primera vez esa misma tarde. ¡Estaba tan emocionada! Llamé a mi hermana y hablamos brevemente. Después de colgar, ella empezó a buscar en Google el nombre de Stephen y me envió un correo con una foto de un joven apuesto que se parecía mucho a mi antiguo novio y a mi hijo mayor. Llevaba una camisa negra y un alzacuellos de cura. Stephen estaba en el seminario".

"Recuerdo que mi primer pensamiento fue: '¡Qué lástima, va a ser cura!'. Pero, luego, me dije: '¡Vaya, va a ser cura! ¡Qué guay! ¿No me dará vía libre para ir al cielo o algo así... por ser la madre de un sacerdote?'. A las 17:01, corrí y me senté en mi cama a esperar su llamada. Recuerdo estar mirando el teléfono, preguntándome cuántas veces debería dejarlo sonar. La respuesta era obvia: un timbre sería suficiente", recuerda.

"Entonces sonó el teléfono y ¡hablamos durante tres horas! Nos metimos en las páginas de Facebook de cada uno y miramos todas las fotos. Recuerdo que me mostró una foto en la que yo habría jurado que era mi antiguo novio el que estaba allí y no Stephen. Era una sensación increíble, conocer a alguien sin conocerlo. Un sentimiento que es difícil de describir. Pasamos el siguiente mes y medio hablando casi a diario".

"Durante ese tiempo, puse en contacto a Stephen con su padre biológico, lo que fue algo maravilloso para ambos, e hicimos planes para encontrarnos en persona el día de Acción de Gracias. Él estaba en Maryland, en el seminario, y yo, en Washington, ambos hicimos planes para volar a casa. Stephen eligió el lugar del encuentro: la gruta del campus de la Universidad de Notre Dame".

"Aquella mañana estaba muy nerviosa. Cuando llegué al campus, me tomó tiempo encontrar la gruta, así que llegué unos minutos tarde. Recuerdo que al doblar una esquina vi la gruta y luego a un hombre delgado arrodillado frente a ella. Stephen me oyó, se levantó y se dio la vuelta. No podía creer que estuviera delante de mí, me sentía emocionada. El largo sueño había terminado; ¡por fin era realidad!".



Laura Richards y su hijo"Ella empezó a buscar en Google el nombre de Stephen y me envió un correo con una foto de un joven apuesto que se parecía mucho a mi antiguo novio y a mi hijo mayor".

"No hay palabras para describir aquel encuentro. Cuando ya habíamos pasado un rato juntos, él empezó a decirme: '¿Sabes, mamá?, Dios te ama mucho'. Al principio, yo respondía: 'Sí, lo sé'. Porque nací y crecí católica, asistí a la escuela primaria y secundaria católica, asistí a clases de catecismo y a una universidad católica... Por supuesto que lo sabía, pero realmente no iba mucho a la Iglesia. Sin embargo, Stephen continuó diciéndome: 'Dios te ama mucho, mamá. Ni siquiera puedes imaginar cuánto'".

"Él repetía su 'mantra' y recuerdo que me detuve por un momento y pensé: '¿Eh, de verdad? ¿Es realmente posible? ¿Él, que es el Creador de todo el universo? ¿Él, que creó las estrellas... realmente se preocupa por mí? ¿Cómo es posible? Soy un ácaro de polvo. No soy nada más. ¿Cómo es posible?'".

"La primavera siguiente, Stephen me invitó al seminario a pasar una semana para estar juntos. Una noche salimos a cenar con un amigo que también estaba en el seminario. Su amigo nos contó su historia de conversión. Había estado trabajando como informático y en un momento dado sintió que Dios lo llamaba a tener una relación personal con Él. Pensó: 'Si quiero conocer a mi Creador, si quiero saber a qué me llama, necesito pasar tiempo con Él. Necesito ir a la iglesia más de una vez a la semana, todos los días si puedo'".

"Cuando regresé a casa, seguí pensando en esa historia. Si el Creador del universo me ama, probablemente quiera conocerme. Y probablemente quiera que lo conozca. Entonces hice lo mismo que el amigo de Stephen: empecé a ir a misa a menudo. Le pregunté a mi jefe si podía entrar a trabajar pronto y salir para ir a la misa de ocho. Recuerdo que hizo un comentario sarcástico, algo así como que no quería ser la razón por la que yo me fuera al infierno".

"Un día, en la misa dominical, el sacerdote se levantó para pronunciar la homilía y leyó esto: 'Es verdad. Estoy a la puerta de tu corazón, día y noche. Incluso cuando no estás escuchando, incluso cuando dudas que pueda ser yo, estoy ahí...'. Él sabía todo sobre mí, todas las cosas malas que había hecho, y, sin embargo, me había amado toda mi vida. ¡Qué alegría saber eso! ¡Qué consuelo!". 


Puedes escuchar aquí el testimonio de Laura Richards.

"Entonces, me pregunté, ¿por qué nadie me había dicho esto antes? Tengo 40 años, por el amor de Dios; hubiera sido bueno saber esto antes. Él estuvo allí cuando yo estaba embarazada y dí en adopción a mi hijo. Y este niño, a quien salvé, regresó y me salvó; todo eso estaba en su plan", concluye Laura, que ahora es terciaria carmelita.

Fuente: Religión en LIbertad

Eurovisión 2024: jurados dóciles a la doctrina de género, pero el pueblo votó Teresa y Virgen María

 


Eurovisión 2024: jurados dóciles a la doctrina de género, pero el pueblo votó Teresa y Virgen María

Jerry Heil y y Alyona Alyona cantan en Eurovision 2024 sobre la ayuda de los santos

Jerry Heil y y Alyona Alyona, que declaran ser personas espirituales, quedaron terceras en Eurovision 2024 cantando Teresa y Maria

Hacer sociología religiosa a partir de los resultados de la noche de Eurovisión no es ciencia exacta, pero hay algunos rasgos que sí se pueden observar, y quizá con el tiempo salgan más datos, quizá encontremos miembros de jurados que nos dirán "teníamos que votar a Suiza por su apuesta no binaria, y no a Ucrania, que era demasiado religiosa".

Nemo, el rapero de Suiza que declaraba ser "no binario" y desfiló con la bandera trans o no binaria, cantó acerca de establecer su propia verdad y su propia definición del bien y el mal: un himno al relativismo, con el yo-yo-yo en el centro. Se apoyaba en falsetes y agudos, minimalismo en la escenografía (por lo mismo, yo-yo-yo; el francés Slimane también estaba solo, pero él cantaba de amar a otra) y una melodía pegadiza (nada elaborada, oh-oh-oh). Y quizá instrucciones políticas en pasillos y jurados.

Sus grandes rivales eran Croacia (rock tirando a heavy, festivo y algo gamberrete), Francia (impresionante dominio del escenario de Slimane, chorro de voz y amor y romanticismo, masculinidad firme pero entregada) y Ucrania, con la canción "Teresa & Maria" que ahora analizaremos.

También estaba Israel (solo 52 votos de los jurados, pero 323 del público por razones políticas ligadas a guerra de Gaza) y otra de propaganda no binaria pero mezclada con brujería de Irlanda (142 puntos del jurado, 136 del público, cantaba sobre usar magia para vengarse por un desamor, una de las causas más comunes de acercarse al ocultismo, con rencor y agriedad).

Resultados finales de Eurovisión 2024, obsérvese la diferencia entre el voto popular y el de los jurados, volcados en la corrección política:


Ucrania, la canción que ponía a las santas como ejemplo y ayuda

Con solo 146 votos de los jurados, rendidos a las directrices de ideología de género, las ucranianas Jerry Heil y Alyona Alyona habían quedado en una posición discreta, pero el público (que es de todo el mundo, no sólo de los países participantes) le otorgó 307 puntos, el tercer mejor voto de público, y bastante más que los 226 otorgados a Nemo y Suiza.

La canción de las ucranianas había sido atacada en días previos por sus alusiones religiosas a la figura de la Virgen María y de Madre Teresa, en concreto ¡por presentarlas como figuras positivas!

La canción de Ucrania: feminidad y fuerza, apoyándose en los ancestros y los santos, que fueron niños y personas como cualquier otra, y perseveraron:



Las cantantes en declaraciones intentaron reconducir la canción hacia lo "espiritual pero no religioso" y a valores compartidos por todos, de resistencia y fuerza, que ellas ven en las mujeres de Ucrania en la guerra, al mantener un país golpeado por bombas, con los hombres en el frente, con viudas y madres que pierden a sus hijos (es decir, la dura vida real, tan distinta del yo-yo-yo de la nobinariez).

En la primera semifinal del 7 de mayo, compitiendo 15 países, ganó la festiva-heavy Croacia obtuvo 177 puntos, y "Teresa & María", de Ucrania, quedó segunda con 173. Por lo tanto, la canción ucraniana tenía fuerza y atracción ya desde un principio. Por eso, es sospechoso el bajón de los jurados nacionales en la final, solo compensado por votos de nivel medio-alto entre los países bálticos y eslavos solidarios con su vecina que sufre bajo las bombas.

Tuvo que venir el voto del pueblo a intentar compensar el sabotaje de las élites. (Señalemos que en las otras semifinales, en las que estaba Nemo, la canción suiza quedó 4ª con sólo 132 puntos: parece claro que alguien insistió en reforzarla en pasillos de jurados en la final).

¿Qué molesta a las élites descristianizadas de la canción ucraniana? Repasemos la letra: no es un himno de parroquia, pero era suficientemente religiosa como para inquietar a muchas personas hostiles al cristianismo, empezando por hablar de Madre Teresa de Calcuta y la Virgen María como modelos de mujer fuerte, pero que no cayeron del Cielo, sino que también fueron niñas, crecieron, fueron haciéndose con sus decisiones.

Hablan de pesos que caen sobre los hombros (armadura de hombros en el traje de Jerry, mezclado con traje largo muy femenino: fuerza y feminidad juntas) y de dar "ánimo" porque Mama Teresa y la Virgen María están "z namy" (con nosotros). La idea de que "está en tu mano" hacer mucho no es pelagianismo, sino que combate tanto el derrotismo como la mentalidad soviética de que "ya lo arreglará el Estado o el Partido" que impide la iniciativa personal. Incluso habla de la muerte: "los años pasan volando, pronto todo terminará". Y de los santos y ancestros que han vivido cosas como nosotros, y nos apoyan desde el Cielo.

Teresa & Maria (letra en español)

Una co-co-corriente / Haciendo su camino / No importa, no importa qué

El mundo está sobre sus hombros Des-des-desvíos / Lluviosos, rocosos /

Pero debes saber esto: está en tu mano / Tu propia felicidad

Vamos niña, ánimo / No soy santa, estoy viva

La Madre Teresa y la Virgen María están con nosotros

Descalzas, como sobre una espada, caminaban por el suelo

Con nosotros está la Madre Teresa, la Virgen María

Todas las divas [vírgenes] nacieron como seres humanos

Ya desde pequeños buscábamos el camino

Pero la vida es un bucle, también para los que caen

Una niña todavía lleva sobre sus hombros

Dolorosamente, un balde y ella sabe que es un defecto

No tienes razón otra vez, eres demasiado blanda

Ropa colgada sobre tus huesos, desnuda o yendo a casarte

¿Donde esta tu hijo? ¿Qué es tu vida?

¡Pero los años pasan volando! Y luego: pronto todo terminará

Déjalos que deseen que nos rompamos

A veces solo tienes cierta energía / No hasta el codo, sino hasta el dedo

Y déjalos esconderse detrás de una sonrisa / Odio y envidia

Cuando dejas que la ira entre en tu corazón / En vez de bondad y amor

Pero hay santos en el cielo

Sus pies han visto esta tierra, ¿sabes? / Tu camino espinoso

Por eso no es en vano / aunque sea muy aterrador y oscuro

Y a veces no es fácil / Pero siempre estarán contigo

Ancestros que te siguen desde el cielo

Las cantantes y las santas: "mujeres de lo alto dan fuerza, fe y luz"

La rapera Alyona Alyona, cuando vio que había muchas críticas antirreligiosas contra la canción, hizo matizaciones en entrevistas europeas, asegurando que trataba sobre "cuánto ha recaído sobre los hombros de una mujer". Añade que la mujer de la canción se alzará porque "ella es fuerte, también su fuerza radica en que no está sola, esas mujeres de lo alto le dan fuerza, fe y luz, eran mujeres justo como ella".

Concretó además, en Euronews, que la canción está dedicada a las profesoras de una escuela de Dnipró que fue destruida por misiles rusos en 2022, y que el dúo recauda fondos para reconstruir una escuela destruida en la guerra.

Su colega Jerry Heil (nombre artístico de Yana Shemaieva) declaró que la Madre Teresa y la Virgen María se citan como "símbolos de pureza espiritual" y que la canción "no trata de religión, sino de fe".

Entrevistadas por Anna Tuliieva tras la semifinal, explicaron que a veces decimos de alguien ya fallecido "vaya, eran unas santas, hicieron cosas grandes", pero "todos los santos nacen como humanos, y pensamos que ese era un gran tema". "Somos personas espirituales", reconocieron las cantantes, quizá esperando que eso bastara para aplacar a los antirreligiosos. No bastó, por supuesto. En cambio, en Ucrania, entre el voto de la competición para elegir representante, les apoyaron 720.000 votantes, el 62% de los que votaron.

Todo lo contrario: la apoteosis de la nobinariez

Mientras una Europa busca fuerzas de lo alto para afrontar retos brutales y reconstruir escuelas bombardeadas, hay otra que se disfraza con corona de espinas (la que llevaba Nemo, reinado del victimismo y parodia de Cristo) y celebra la confusión. Está simbolizada por la canción que los jurados elevaron, la de Nemo, representante de Suiza.

Varias veces los locutores de RTVE dijeron a los espectadores -contra la Real Academia de la lengua, pero quizá siguiendo órdenes del comisario de género- que "elle está muy emocionade".

Nemo ha declarado ante la prensa que la canción "trata sobre el viaje en el que comencé a darme cuenta de que no soy ni hombre ni mujer. Encontrarme ha sido un proceso largo y complicado para mí, pero nada me hace sentirme mejor que la libertad que he ganado al darme cuenta de que soy no binario". Por ahora.

"Mi verdad", y no la verdad; "mi camino", y no el camino; pasar "del cielo al infierno", "encontré mi juicio final", "lo que está bien, lo que está mal"... no habla solo de sentimientos: la canción, con todo su lenguaje religioso, busca elevar los sentimientos a la categoría de realidad, incluso de verdad revelada, sin pasar por la ciencia o la razón, y desde luego sin deber nada a nadie.

Nemo y su oh-oh-oh es en realidad un yo-yo-yo: el modelo de hombre-no-hombre que las élites proponen para Europa, si los europeos no reaccionan:


Esta es la letra:

Bienvenido al show, que lo sepa todo el mundo.

No estoy jugando al juego, he roto mis cadenas.

Abróchate el cinturón, ahora mando yo.

Esta es mi bohème, así que bébetela, amigo.

Esta historia es mi verdad.

Yo, yo he ido al infierno y de vuelta / para encontrar mi camino.

He descifrado el código, oh oh oh.

Como ojos desde el cielo, / simplemente le di algo de tiempo.

Ahora siento el paraíso. Sí.

Deja que te cuente un cuento sobre la vida, sobre el bien y el mal, agárrate fuerte.

Lo que está bien, lo que está mal, lo que está bien.

Todo está en equilibrio, todo es ligero.

Pasan tantas cosas por mi mente.

Y estaré despierto toda la noche.

Estoy tan motivade, estoy tan mentalizade.

Es más grande que yo, me están entrando tantas ganas.

Deja que saboree los bajos y los altos.

Deja que sienta ese susto ardiente.

Esta historia es mi verdad.

Yo, yo he ido al infierno y de vuelta

para encontrar mi camino

He descifrado el código, oh oh oh.

En algún lugar entre los ceros y los unos

juro que encontré mi juicio final.

El festival dio para muchos más elementos de análisis. España, con su canción mediocre, letra zafia y escenografía grosera y soez, quedó cuarta desde la cola, y millones de españoles se alegraron.

Por otra parte, si miramos la canción menos votada, la de Noruega, nos encontramos un canto perfectamente potente, con toques étnicos, folk-rock épico con nickelharpa y guitarra eléctrica, reminiscencias tipo Garmarna o Hedningarna del folk nórdico, despliegue de efectos especiales y de voz. ¿Se le castigó por cantar en noruego, por intentar una síntesis de raíces y rock? ¿Debe todo el mundo cantar solo en inglés?

Fuente: Religión en libertad